El cambio de ciclo es imparable: Sánchez ha perdido 5 de las 6 autonómicas desde que está en Moncloa
La clave del apabullante triunfo de Moreno: 300.000 votantes ‘robados’ al PSOE y hasta 150.000 a Vox
Moreno logra una mayoría absoluta histórica en Andalucía, Sánchez se pega un batacazo y Vox gripa
La derecha avanza hacia un triunfo histórico con Feijóo en cabeza y Abascal a sólo 4 escaños de Sánchez
La debacle del PSOE en las elecciones celebradas este domingo en Andalucía confirma el agotamiento de la legislatura de Pedro Sánchez. El batacazo del candidato, Juan Espadas -30 diputados-, el peor resultado histórico para los socialistas en su bastión durante cuatro décadas, manifiesta el rechazo de la ciudadanía a la gestión económica y política de Sánchez, a sus pactos con proetarras e independentistas, a su ataque a las instituciones y, en definitiva, a sus reiteradas maniobras para sostenerse en el poder. Desde que el socialista se instaló en La Moncloa ha perdido todas las elecciones autonómicas, a excepción de Cataluña. En muchos casos, con destrozos históricos y especialmente simbólicos, como el del 4-M en la Comunidad de Madrid. En Andalucía, el Partido Popular ha pasado de 26 a 58 escaños en apenas tres años y medio.
Ferraz trata de desvincular los resultados andaluces del futuro de Sánchez, pero ese mensaje se cae por su propio peso teniendo en cuenta que estas han sido unas elecciones de evidente carácter nacional. Desde los anteriores comicios, en 2018, el PSOE ha perdido 3 escaños y 127.182 votos.
La vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, evitó este domingo cualquier autocrítica y, en su lugar, arremetió contra Juanma Moreno, atribuyendo incluso su victoria a los fondos transferidos a la región por el Gobierno de España.
Pero la derrota difícilmente tiene excusa para los socialistas. Caen por debajo del suelo de los 33 diputados de Susana Díaz, la barrera psicológica en la que se habían consolado durante la campaña. Confirman que son incapaces de movilizar a sus votantes y, es más, observan cómo buena parte de ellos apuesta ahora por el PP. Una de las claves de la victoria de Moreno ha sido, precisamente, haber atraído al votante socialista decepcionado con las políticas sanchistas y al indeciso que dudaba entre los dos partidos mayoritarios. La derrota es especialmente dolorosa en algunos feudos, como Sevilla.
Derrotas
Desde la llegada de Sánchez a La Moncloa, con la moción de censura de junio de 2018, el PSOE ha ido de batacazo en batacazo. Las tres últimas elecciones autonómicas -que miden el cambio de ciclo a nivel nacional- se saldaron con derrota. En Castilla y León los socialistas perdieron 7 escaños y 118.000 votos tres años después de ganar las elecciones de 2019. En la Comunidad de Madrid, el PSOE cosechó su peor resultado histórico en la región, bajando por primera vez de los 30 escaños (24), y del 20% de los votos (16,80%). En comparación a los anteriores comicios, los socialistas se dejaron 13 diputados y 270.000 votos, frente al indiscutible éxito de Isabel Díaz Ayuso (65). Además, el PSOE perdió también el papel de líder de la oposición, siendo desbancado por Más Madrid por 4.000 papeletas.
Los socialistas sólo tienen en su haber el triunfo de las elecciones en Cataluña, de febrero de 2021, que ganó Salvador Illa con 33 escaños. El resultado, no obstante, fue el mismo que ERC -principal aliado de Sánchez- y no le sirvió para gobernar, pues el independentismo rentabilizó las cesiones del Gobierno español y salió también reforzado de aquellos comicios (65 diputados entre ERC y Junts). La conclusión es que la Generalitat, con Pere Aragonés al frente, sigue hoy en manos de los separatistas.
El PSOE también cosechó nefastos resultados en las elecciones del País Vasco y Galicia, celebradas en 2020, viéndose incluso adelantado por el Bloque Nacionalista Gallego y por Bildu. En Galicia, los socialistas no lograron sumar ni un escaño más a los 14 que tenían mientras Alberto Núñez Feijóo arrasaba con 42. En los comicios vascos el PSOE sacó 10 escaños, lejos de los 21 de Bildu y de los 31 del PNV. Ambos partidos mantienen a Sánchez en La Moncloa.
La lectura que hacen en Ferraz es que ni en Madrid ni en Castilla y León gobernaban, por lo que la derrota, a su juicio, no sería tal. En la maniobra para esconder el fracaso, los socialistas suman ahora también a Andalucía, su feudo durante cuatro décadas, como «territorio favorable» al PP.
«Tres elecciones autonómicas en tres territorios favorables al PP para intentar consolidar su propia imagen», despachó Lastra en su interpretación de los resultados. El PP, destacó, «mantiene 3 gobiernos que ya ostentaba».
El resultado confirma un cambio de ciclo a nivel nacional. Según la última encuesta de Data10 para OKDIARIO, la derecha avanza hacia una victoria histórica, con el 47% de los votos. Alberto Núñez Feijóo sería el más votado, con 98 escaños, a distancia de Pedro Sánchez, con 91. Vox, con 87, acaricia el sorpasso al PSOE.